El cementerio de Canet es el resultado de una ley de 1830 que obligaba a hacer los enterramientos en los alrededores. El lugar elegido fue el “camp d´en Tinoia”, encima de un pequeño monte. Dentro de la casa de los muertos se pueden ver algunas piezas realizadas por prestigiosos artistas. No se puede pasar por alto el panteón de los Busquets, construido entre 1906 y 1909 con un modernismo muy suave. Lluís Domènech i Montaner diseñó tres panteones: el de la familia Font Montaner, de la familia Montaner Malató y de la familia Domèmech i Montaner. A parte de estas obras de arte, posiblemente el monumento más significativo es el Àngel del Judici, obra del escultor Pagès Serratosa, y que se encuentra en el panteón de la familia Pau Font.